Causas de la Guerra
Para
que este conflicto se desatara, fueron determinantes los acontecimientos del
entronque entre siglos.
Recordemos
que al finalizar el siglo XIX se dio el llamado “Imperialismo” que consistía en el dominio de una nación
desarrollada sobre una más débil, con la finalidad de explotar sus recursos
naturales, de ahí surgieron como potencias Estados Unidos, Alemania, Francia,
Italia, Inglaterra, Rusia y Japón; llevando como consecuencia una política colonialista
de las grandes potencias, repartiendo sobre todo el continente africano y
asiático, lo que hacía tensas las relaciones mutuas.
Por
otro lado, el desarrollo de Alemania
mediante el notable impulso del proceso de industrialización del país, que lo
convirtió en la primera potencia europea de principios del siglo XX, con una
necesidad inaplazable de controlar más colonias donde depositar su producción.
Para
la defensa de sus intereses, los países europeos se organizaron en alianzas. La
competencia entre los países se transformó en la formación de dos bloques:
A) La
Triple Alianza,
integrada por Alemania, Austria-Hungría e Italia entre 1979 y 1882.
B) La
Triple Entente, formada por Francia, Rusia e Inglaterra entre 1891 y 1907.
También
se vivió un periodo de paz armada
entre 1970 y 1914 que se caracterizó por la carrera armamentista emprendida por
cada país imperialista; en medio de una paz aparente, se pensó que solo las
armas podían defender sus colonias y conseguir otras.
Surgió
un llamado enfrentamiento nacionalista,
que consintió en que Francia aspiraba a recuperar Alsacia y Lorena, mientras
Alemania soñaba con unificar todos los pueblos de habla germana. Por otra
parte, el nacionalismo esclavo de los Balcanes, apoyado por Rusia, tenía como
meta acabar con el dominio turco y liberar a los esclavos sometidos al imperio
austro-húngaro, el imperio Otomano intentaba, a su vez, reconquistar los
pueblos Balcánicos, Crimea y eñ Cáucaso.
El conflicto terminó cuando Alemania
obtuvo la concesión para construir la línea del ferrocarril de Berlín a
Bagdad.
En
octubre de 1908 Bosnia-Herzegovina declararon su anexión al imperio
austro-húngaro que se encontraban bajo el control de los turcos, Serbia
protestó y solicitó ayuda a Rusia,
sin embargo ésta no pudo acudir al llamado, por encontrarse debilitada por el
fracaso con Japón en 1905. Se generó la alianza entre países Balcánicos:
Serbia, Bulgaria, Grecia y Montenegro.
Entre
1912y 1913 se llevó a cabo las guerras
balcánicas donde la alianza Balcánica sostuvo dos devastadoras guerras
contra los turcos, a quienes con la ayuda de Rusia lograron expulsar del
territorio europeo. En agosto de 1913, por el tratado de Bucarest se puso fin
al conflicto, Rusia seguía manteniendo su influencia sobre los países esclavos,
Austria y Alemania veían lesionada la política expansionista y Francia e
Inglaterra resultaron afectadas en sus intereses financieros y estratégicos.
El
28 de junio de 1914, en la ciudad de Sarajevo, el príncipe heredero de la
corona de Austria, Francisco Fernando, fue asesinado junto con su esposa en la
capital de Bosnia por Gabrilo Princp, un estudiante ligado a las sociedades
serbias de tipo nacionalista. Con el apoyo de Alemania, el imperio
austro-húngaro aprovechó este acontecimiento como pretexto para sojuzgar a Serbia. El 23 de julio se le
envió un ultimátum a través del cual le imponía una serie de condiciones que
atentaban contra su soberanía. El 28 de julio Austría-Hungría declaró la guerra
al pequeño país. Ante esta acción, Rusia movilizó sus ejércitos a las fronteras
austro-húngaras. Alemania le declaró la guerra el 1° de agosto y dos días más
tarde lo hizo contra Francia. Alemania invadió Bélgica por lo que Inglaterra, a
su vez declaró la guerra al haber violado la neutralidad de ese país.
El Desarrollo
La guerra movilizó una gran masa
de soldados. Los aliados de la Entente contaban con unos 4 millones del
ejército francés y unos 6 millones rusos. Serbia y Bélgica contaban con medios
limitados, mientras Gran Bretaña ofrecía su cuerpo expedicionario bien armado y
entrenado, el dominio del mar y el bloqueo consiguiente de las potencias
centrales. La triple Alianza contaba con el todopoderoso ejército alemán con
más de 4 millones de hombres, y el de Austria-Hungría también numeroso aunque
cohesionado debido a las múltiples nacionalidades que lo integraban.
Primera guerra de movimientos (1914-1915)
Alemania puso en práctica el plan
Schileffen que consistía en una guerra corta y en un solo frente, y así
distraer a Francia en su frontera común con unas cuantas divisiones y enviar su
mayor potencial a través de Bélgica, para lograr derrotarla en un plazo no
mayor de seis semanas. Este plan fracasó, porque cuando los alemanes estaban a
punto de vencer a Francia, en la batalla del Río Marne en septiembre de 1914,
Rusia inició su ofensiva contra Prusia abriendo el Frente Oriental, por lo que
Alemania dividió sus ejércitos con lo que disminuyó s poder en el frente belga.
Con la finalidad de arrebatarle sus colonias en el Océano Pacífico, Japón le
declaro la guerra a Alemania. Rusia invadió el imperio austro-húngaro. La
guerra también se expandió al mar en los océanos Pacífico, Índico y el Mar del
Norte donde se enfrentaron la marina inglesa y la alemana.
Guerra de Trincheras (1915-1917)
Como consecuencia del agotamiento
humano y militar, las fuerzas de ambos bandos se replegaron y se estabilizaron
en los frentes occidental y oriental. Esto convirtió al conflicto en una guerra
de posiciones o de trincheras, en la que a lo largo de miles de kilómetros se
cavaron grandes zanjas, protegidas por alambrados. Esta situación modificó las
condiciones de la guerra, porque a partir de entonces el principal problema
consistió en el abastecimiento. Por esta circunstancia, y tenía mayores
posibilidades de triunfar quien tuviera mayor capacidad industrial y económica.
Rusia no pudo cumplir con su programa de abastecimiento y empezó a mostrar
debilidad en el frente oriental, por lo que Alemania envió una poderosa
ofensiva en febrero de 1915, con la finalidad de derrotarla. Al no conseguirlo,
permitió que los países del frente occidental lograran superioridad al
reagruparse y proveerse de material bélico.
Italia, que hasta entonces había
permanecido indecisa, declaró la guerra en mayo de 1915 a sus antiguos aliados;
Bulgaria, por su parte, combatió al lado de los imperios centrales. Alemania
inició la guerra submarina contra todo barco que pretendía llegar a Inglaterra
y a Francia. En mayo de ese año, Estados Unidos protestó ente el gobierno
alemán por el hundimiento del Lusitania, barco inglés en el que viajaban
ciudadanos norteamericanos. A principios de 1916, Alemania inició sus ataques
contra Francia en Verdún, después de violentos enfrentamientos que costaron
casi un millón de vidas a ambos países, la primera salió derrotada. En junio
del mismo año, se inició una cruenta batalla en los valles del Somme, donde la
artillería, la aviación y las fuerzas motorizadas inglesas y francesas
infringieron una nueva derrota a los alemanes. A principios de 1917, en Rusia
se inició una revolución, que la obligó a salir de la guerra. En abril de ese
año, los Estados Unidos habían declarado la guerra a Alemania teas el
hundimiento del barco Vigilantia que sumando al incidente de 1916 determinaron
su ingreso al conflicto, y se aliaron con los países de la Entente, pero fue
hasta 1918 cuando el ejército entró en acción.
Segunda guerra de movimientos (1917-1918)
Al salir Rusia de la guerra,
quedó cerrado el frente oriental, motivo por el cual Alemania preparó una
ofensiva final contra la Entente. Los alemanes atacaron por sorpresa a las
fuerzas franco-inglesas, y aunque lograron infringir serias derrotas al
enemigo, por falta de reservas no las pudieron aprovechar. A mediados de 1918,
la ofensiva se concentró en el río Marne, en donde fue decisiva la
participación de los ejércitos norteamericanos para lograr la victoria. La
derrota alemana generó el desarrollo de la revolución interna, que logró
derrocar la monarquía de Guillermo II y permitió la instauración de una
República. Finalmente los países de la Entente lograron derrotar por completo a
los ejércitos alemanes en septiembre de 1918, mes en que coincidió con las
derrotas y rendiciones de Bulgaria, Austria y Turquía.
Consecuencias
Para
finales de 1917, la triple alianza se encontraba seriamente debilitada, ya que
al ser Alemania el único país con el desarrollo armamentista, tenía que entrar
en auxilio de los países aliados, por otra parte, la entrada de los Estados
Unidos a la guerra, la triple entente tenía un aliado que podía apoyar militar
y económicamente a los aliados. En enero de 1918, el presidente norteamericano
Thomas Woodrow Wilson, propuso los catorce puntos, que pretendían la supresión
de los tratados secretos entre países, la eliminación de trabas aduanales, la autonomía
de los pueblos que conformaban el imperio Austro-Húngaro y la creación de la
Sociedad de las Naciones. En noviembre de ese año se firmó entre Alemania y los
países vencedores el armisticio, en el que se establecieron los siguientes
puntos:
-
Suspensión
total de las hostilidades
-
Evacuación
de los países ocupados
-
Derogación
de tratados con Rusia
-
Entrega
de armamento
A principios de 1919, se
iniciaron en Francia las negociaciones entre Wilson de Estados Unidos, Lloyd
George de Inglaterra, y Georges Glemenceau de Francia, quienes en junio de ese
año signaron el Tratado de Versalles, en el que se responsabilizaba a Alemania
de la guerra y se le imponía severas condiciones para la paz como su renuncia a
todas sus colonias en beneficio de los vencedores, reducción de su ejército,
anulación del servicio militar, pago de la indemnización por daños y gastos de
guerra. A pesar de firmarse la rendición, la guerra dejó serias consecuencias
de diferente índole.
Económicas:
La
guerra propició el declive económico de Europa, que sufrió pro el deterioro de
su infraestructura interna[5].
Se
presentaron crisis agrícolas y de producción en general, que trajeron consigo
pérdidas de mercado.
Las
potencias europeas perdieron su preponderancia económica.
Los
Estados Unidos se erigieron como la primera potencia mundial[6].
Políticas:
-
Ante
los acontecimientos de la guerra, los gobiernos concentraron mayor poder, por
lo que atentó contra los principios del el sistema democrático liberal y los
modelos económicos del liberalismo[7].
-
Con
el triunfo de la revolución rusa, las relaciones internacionales se
transformaron en busca del aislamiento de Rusia.
-
Tras
la firma del tratado de Versalles, se acentuaron las fricciones entre lis
países vencedores que no quedaron satisfechos con el nuevo reparto colonial y
con los países vencidos que fueron sometidos a condiciones de extrema pobreza y
pérdida de sus territorio colonial[8].
-
Surgió
la Sociedad de Naciones, institución internacional que se propuso preservar la
paz y la cooperación mundial.
-
Desmembramiento
del Imperio Austro.Húngaro, que transformó la geografía política al aparecer
nuevos países independientes como Yugoslavia, Austria, Polonia, Checoslovaquia,
Hungría, Letonia, Lituania, Estonia y Finlandia.
Sociales:
-
La
pérdida de más de 10 millones de vidas, además de los lisiados y enfermos.
-
Las
epidemias y condiciones de hambre y miseria que padeció la población.
-
Las
protestas del proletariado que, al demandar mejores condiciones de vida,
fortalecieron el movimiento obrero.
-
La
participación de la mujer, que reclamaba mejores condiciones laborales e
igualdad de derechos sociales.
Todas ellas, con el paso del
tiempo fortalecerían la lucha obrera, crisis económica que desembocará en el
“jueves negro” de 1929, la creación de una carrera armamentista que culminaría
con la segunda guerra mundial.
La llamada guerra imperialista o
primera guerra mundial fue el fruto de la ambición desmesurada de los países
que lograron un desarrollo económico muy fuerte a finales del siglo XIX y
principios del XX. Aun cuando las causas y consecuencias ya se han expuesto en
el presente texto, es importante recalcar que, la causa de este conflicto fue
la codicia. El imperialismo permitía un nuevo colonialismo, ya no de esclavitud
y dominio a distancia, sino de la obtención de materias primas, mercados
vírgenes para explotar y generar capitales, el nuevo orden lo imponían los
países más ricos.